Ciudadanos porteños:
Cuando caminamos por la ciudad y vemos que se parchan los hoyos, se colocan luminarias, se rescata la Avenida Altamirano, se tropieza el transeúnte local con muchos extranjeros, a los que hay que cuidar para que sean nuestros embajadores en el mundo, estamos levantando la voz para destacar que mucho se ha ganado con la reciente gestión del Alcalde Cornejo.
Es justo también reconocer que el funcionamiento del Metro Regional ha acercado la ciudad cabecera de la V Región al gran Valparaíso que se entroniza en los valles de Quillota, Limache, Olmué y de allí sigue por Calera a los valles de La Ligua y Petorca o al valle de Aconcagua.
La obra que empezamos a disfrutar facilitará la vinculación de la costa con el campo. Muchos visitantes del interior podrán venir a recorrer la ciudad patrimonial. Se fortalece el turismo interno y también la oferta de la zona a los extranjeros.
Pero está pendiente y no se debe olvidar, el uso pretendido de la costanera como suelo inmobiliario, quitándole su destino portuario natural.
Es riesgoso que el puerto quede ahogado por edificios. Es bueno que la gente pueda disfrutar de su borde costero, pero no con emplazamientos de edificios que anulen la pública concurrencia a esos paseos de costanera y una eventual reconversión a zonas portuarias si así se requiere por cualquier causa.
He aquí un punto pendiente, que se ha disimulado bien en la campaña electoral. No se ha hablado del tema, ya que el gobierno y el Municipio bajo la gestión del anterior Alcalde, han apoyado y han estado involucrados en el proyecto de la Empresa Puerto Valparaíso, que impulsó el acceso Sur para profitar con el uso inmobiliario de esos terrenos de la costanera, que siendo públicos le fueran asignados para el fin portuario y no otro.
La ciudadanía se ha opuesto por conductos legales y la Corte de Apelaciones acogió un recurso de ilegalidad por la forma cómo se tramitó la modificación del Plano Regulador de la ciudad. Es un asunto que ha quedado pendiente y que ha congelado una situación para que sea resuelta por las nuevas autoridades.
Por eso, en Valparaíso y en particular en este Foro ciudadano, se espera que transcurran las elecciones para pedirle a las autoridades que resulten electas, conversar en serio, con transparencia y respeto a la ciudadanía, exigiendo que se trasluzcan los intereses entreverados detrás del megaproyecto, cuidando los intereses de los trabajadores portuarios, de los transportistas terrestres, de los trabajadores aduaneros que no entienden cómo se podrá operar si la Aduana abandona la zona primaria de los frentes de atraque y se repliega al alto del puerto, con una logística altamente riesgosa, que implica dos túneles para poder llegar desde el antepuerto a la orilla.
Valparaíso como comunidad ha visto que en estas elecciones a lo sumo se han sembrado consignas. Que es poco lo que se ha escuchado de planteamientos serios y de fondo sobre la ciudad. El centralismo ha pisado fuerte en la ciudad y los habitantes han esperado con paciencia un momento propicio para hacerse oir.
El Foro Valparaíso Posible, como punto de encuentro ciudadano, ha querido estar por encima de campañas partidarias. Por encima de intereses cortoplacistas, ya que Valparaíso requiere que se escuche con respeto a la gente local, sin la intermediación interesada de autoridades en tránsito, que sólo manejan el cálculo político coyuntural. Aspiramos a generar un debate para cuando se decante la verborrea y empiece de nuevo a gobernarse con sentido de Estado.
Seguiremos vigilantes, aceptando la diversidad de visiones, disintiendo como clave para aunar visiones. Con la moral ciudadana de quienes han sabido expresar sus planteamientos en pro de la ciudad, para que se dignifique al habitante local, para que podamos generar soluciones a partir de nosotros mismos, sin esperar varitas mágicas ni ofertones demagógicos.
El Foro Valparaíso Posible se reposiciona en los nuevos escenarios de la política nacional, convencidos sus miembros que siempre será necesario fiscalizar a los representantes populares y a las autoridades, para que la tranparencia y la participación dejen de ser eslogans de campaña, para llegar a ser una realidad en nuestra vida cívica cotidiana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario